sábado, 28 de marzo de 2009

Señora de rojo sobre fondo gris de Miguel Delibes


Nicolás, un pintor en crisis, narra a su hija, que ha salido recientemente de la cárcel, el tiempo transcurrido sin ella, las cosas acaecidas en torno a su familia, pero, sobre todo, aquello que concierne a su mujer, La señora de rojo sobre fondo gris que ha fallecido debido a un tumor cerebral.
Mira hacia atrás con nostalgia, sin dolor, sin reproches, quizá hacia uno mismo, pero levemente, con ternura. Se siente un poco culpable por no haber sabido cuidar mejor de ella, por saberla fuente de su inspiración y vacío entonces y ahora intenta llenar su espacio mítico de recuerdos y para ello ensalza su figura y la elogia continuamente, como madre, como mujer, como esposa, pero sobre todo como ser humano lleno de cualidades y dones que la convierten en centro motor de su vida. Y esta forma de narrar hace que no sólo la conozcamos a ella, sino también a él y profundamente además.
La novela se inicia y termina con un interrogante:«No ignoro que el recurso de beber es un viejo truco pero ¿conoces tú alguno más eficaz para escapar de ti mismo?». Y termina: «Si la muerte es inevitable, ¿no habrá sido preferible así?».
Un libro maravillosamente escrito, muy íntimo y lleno de reflexiones acerca de la vida, la muerte, la enfermedad, los amigos, pero sobre todo un canto al ser querido que se ha ido.

1 comentario:

  1. Le dejo el link por si quiees leer lo que publiqué en mi blog sobre esta novela:

    http://cajondehistorias.blogspot.com/2009/02/senora-de-rojo-sobre-fondo-gris-de.html

    ResponderEliminar